REVELACIONES CHÚCARAS
Published martes, junio 21, 2005 by Rodrigo | E-mail this post
Felipe ya lo dijo en su blog. Eran las ganas. Era el sabor amargo de la derrota. Era el temblor en los dedos por la falta de tipeo. Era (en algunos casos) la sobra de tiempo. Eran tantas cosas, pero era también una sóla. Y we’re back!
Ayer se dio el puntapié inicial, en una reunión a la que, nuevamente, no pude asistir. Ya son más de un par las razones que me hacen querer vivir en Santiago, pero heme aquí en Viña aún.... Sé que mi futuro no está aquí, no siquiera en Santiago, pero alejándome 120 Km. supongo que se parte.
Hubiese disfrutado aquella reunión, como seguramente habría disfrutado las otras a las que no pude ir. Los comensales-bebedores-fumadores-conversadores, son de lo mejor para bajarse lo que sea que el presupuesto de.
Recuerdo aquellas reuniones de pauta en que teníamos que dejar las cosas hasta ahí cuando ya no nos reíamos de las buenas y creativas ideas, sino de la incapacidad de los presentes para modular y decir algo en buen castellano. Todo era balbuceo y ojos desorbitados. Cuatro y, a veces, hasta cinco horas de conversa; inventando, riendo, cambiando el mundo desde 1 Norte.
Ahora nos toca de nuevo, pero esta vez sin corchetes ni hotmelt. Sin editores ni fotógrafos. Sin ese director que no dejaba a nadie tranquilo. Sin carreras a la imprenta, ni reuniones con Product Managers. Sin peleas con incompetentes ni con irresponsables. Sin lanzamientos con vinito ni diaporama.
Sólo nosotros, los siete jinetes de un nuevo rocinante que acabamos de inventar, que hoy se llama Letra Chica y que día a día, semana a semana, saldrá con alguna pelada de cable, producto de la mente de siete Tambores (sea porque fueron parte desde dentro o desde fuera), pero que no representan líneas editoriales, ni intereses. Al final cada uno rascándose con sus propias uñas, pero compartiendo el mismo password para darnos el gusto de volver a escribir juntos.
Serán siete columnistas, uno cada día. No sé si cada uno se presentará. No sé si firmarán con sus nombres o con seudónimos. No sé muy bien cómo publicar mi primera columna, pero, como ya lo hice antes, aprenderé con el auto andando.
Las Revelaciones Chúcaras vendrán los lunes. Sí, para empezar la semana. Visiten, lean y, si amerita, posteen. Veremos qué sale de todo esto.
So long, farewell, Auf wiedersehen, goodbye.
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